A pesar de que en HAUS pensamos y defendemos que construir con nuestro modelo y criterio constructivo tiene más retorno sobre la inversión que hacerlo con otras pautas, es obvio que factores como la localización, el diseño, la definición del producto o la propia coyuntura socio-económica del momento son variables que afectaran al resultado de la inversión. Dicho esto también pensamos que los actores o agentes impulsores de nuevos proyectos, tanto si se trata de obra nueva como de rehabilitación, tenemos la responsabilidad de atender a otros criterios que no sean unívocamente económicos.

Entendemos por inversiones de impacto (impact investments), aquellas inversiones que mejoran el entorno social, ambiental, cultural de un territorio, aquellas que una vez realizadas hacen de aquel barrio, distrito o municipio un sitio mejor donde vivir, que ayudan a transformar un determinado sector, a convertirse en referente de cambio.

Cuando la T.I.R. no es lo único que importa.

Ejemplos de este tipo de inversiones son el edifico Cartago Apartments, una rehabilitación integral de un edificio de viviendas de 1947 localizado en el casco antigua de Cartagena, Murcia, y que una vez terminado no solo será el edificio más avanzado en cuanto a sostenibilidad y salud de la ciudad, sino que se situará como referente del municipio ejerciendo una presión sobre el resto de promociones de manera que ya nadie aceptará o querrá pagar un precio mayor atendiendo a los standards de calidad ambiental y bienestar en los que nosotros estamos trabajando.

La otra pieza, aún en fase de licencia municipal y pendiente de la aprobación por cambio de uso, esta ubicada en un barrio periférico de Madrid. Tan pronto podamos nos haremos eco de lo que este proyecto va a representar en el barrio.